1848 es el año en
que el Gral. Justo José de Urquiza dicta
normas que tenderán a organizar la
provincia de Entre Ríos y contribuir al bienestar y el orden.
Las continuas guerras civiles, habían llevado al desorden
social. Los vagos y mal entretenidos serán castigados y reubicados en el
campamento Calá, a partir de ese año. Los pendencieros, jugadores, y
criminales, serán desertores por ese decreto.
Que lo dispuesto se cumplió a rajatabla lo demuestra la
carta que Pedro Maury, le escribe al Gobernador Delegado don Antonio Crespo.
"Desde
Paraná, el 29 de enero de 1848, le cuenta que Juan Garramendia, le ha hurtado
una vaca al moreno Luis Zurpes, hallándose el vasco ahora, engrillado en el
cuartel del Batallón de Cívicos de Paraná.
Se
supone que la lechera, era la única fortuna del moreno, lo que no pudimos
averiguar es quién se quedó con la vaca."
Los documentos históricos suelen ser interesantes,
no sólo por los acontecimientos relatados, su manera de expresarse sino también
suele ser curiosa, como esta correspondencia oficial.
"Caraballito, 15 de
octubre/1863 Señor Jefe Político
Juan Gómez
Mi
estimado cuñado:
Pongo en su
conocimiento que recibí los presos mandados de Curuzú Cuatiá por el Juez de Paz
de ese Departamento don Robustiano Lagraña, los tres engrillados, los mismos
que se los remitió con el alférez Manuel Gallegos. Este regresó con el “mande”
que los presos en el camino se tiraron al suelo, aprovechándose del monte y de
unos palos de ñandubay que había allí, se agarraron para pelear, caso en que el
oficial, tuvo que tirarle unos tiros, y los mató a los tres.
Remito a ud. Una
lista de los objetos que quedan en mi poder perteneciente a otros presos y
también debo dar cuenta que he recibido “mande” de Corrientes, una parte del
robo; un relos, un reboso gris, un anillo, una jerga…que lo demás, está
perdido. Los grillos los lleva el portador.
El
contenido de la lista se lo remitiré tan luego como me sea posible.
Con
este motivo me despido de ud, su afectuoso amigo y SS. Ramón Gallo (AGER,
gob.serie XII.
Hay otra correspondencia muy curiosa donde
un encargado del batallón, remite a su superior, tal como había ordenado, el
preso acusado de homicidio. El oficial le dice que "como sus soldados andan descalzos, porque no tienen botas en vez
del zapatero acusado, le manda un herrero."
-
En tiempos de Urquiza, la Semana Santa era rigurosa para todos..
En tiempos de Urquiza, la Semana Santa era rigurosa para todos..
- " En jueves santo salen, desde Nogoyá cuatro
soldados custodiando a tres presos, con destino a Paraná. Como hacía calor, se apearon
en un arroyo para refrescarse y descansar un rato. Los presos, se comieron unos
pescados a las brasas, sin respetar el ayuno que mandaba la iglesia. A uno se le atravesó una espina y va medio muerto
¡Bien hecho!"